"Cónclave", la película sobre la interna del Vaticano: ¿una premonición sobre Francisco y el nuevo Papa?
El largometraje dirigido por Edward Berger está basado en la novela homónima de Robert Harris, publicada en 2016. Tanto el libro como la película narran cómo es el proceso para elegir a un Papa, en un intento por mostrar un mundo desconocido por su hermetismo, con sus idas y vueltas para definir a su máxima autoridad.
Tras los recientes acontecimientos por la partida de Francisco, la película fue tendencia debido a que su historia parece similar a la del argentino que marcó un antes y un después en la Iglesia católica. Y también, sobre quién podría ser su sucesor.
La historia comienza con la muerte repentina del Papa por un paro cardíaco. Tras este hecho, los cardenales de todo el mundo se reúnen en el Colegio Cardenalicio para elegir a su sucesor. Si bien no se nombra quién es el Sumo Pontífice fallecido, se lo describe como un hombre reformista con tendencia liberal, que mantuvo una vida lejos de la ostentación y que impulsó grandes cambios en la Iglesia, quien es muy querido por la gente pero cuestionado dentro del mundo clerical.
A simple vista, hay quienes creen que este personaje ficticio podría estar inspirado en el Papa Francisco, quien a lo largo de su papado ha mantenido una postura austera y ha cuestionado algunas posturas conservadoras del mundo clerical.
Harris, autor de la novela, reveló que comenzó a escribir esta novela luego de seguir los acontecimientos del cónclave que se realizó en 2013, cuando el Vaticano nombró a Jorge Bergoglio como nuevo Papa. Además, menciona a Juan Pablo II y la renuncia de Benedicto XVI, hecho clave que llevó a la elección del argentino. Sin embargo, negó que el Papa ficticio tenga relación con Francisco.
Luego, la trama muestra el proceso de los cardenales para elegir al nuevo Sumo Pontífice entre cuatro candidatos: Aldo Bellini, un estadounidense progresista que mantiene la misma línea que su predecesor; Joshua Adeyemi, un nigeriano de rama conservadora que se posiciona para ser el primer Papa negro; Joseph Tremblay, un canadiense conservador convencional; y Goffredo Tedesco, un italiano tradicionalista que cuenta con el apoyo del ala más conservadora de la Iglesia.
Sin embargo, en medio de las preparaciones para la votación, el cónclave se ve sorprendido por la llegada de Vincent Benítez (Carlos Diehz), un cardenal mexicano nombrado “in pectore” por el difunto Papa unos meses antes de su muerte que esconde un gran secreto.
Tras mostrar el arduo proceso, que se ve envuelto en polémicas, acusaciones, “carpetazos” y corrupción, se revela quién es el nuevo elegido del Vaticano para comandar la Iglesia católica, en un giro de la trama que genera conmoción.
(ALERTA SPOILER)
Tras un intenso proceso de votación, Benítez resulta elegido como nuevo líder eclesiástico. Sin embargo, antes se revela un dato que sorprende a todos: el cardenal Thomas Lawrence (Ralph Fiennes), encargado de convocar al cónclave, descubre que el nuevo Papa es intersexual.
En la historia, el personaje descubre su condición al ser atendido por médicos tras sufrir un atentado. Quiso renunciar, pero su antecesor rechazó su solicitud y lo nombró cardenal. Además, le habían asignado una cirugía de reasignación de género, pero este la canceló.
Finalmente, Lawrence guarda el secreto, y finalmente Benítez es presentado al mundo como nuevo Papa bajo el nombre de Inocencio. Un cierre que apela a una Iglesia católica más cerca del progresismo que del conservadurismo.
Si bien la novela y la película se toman atribuciones para ficcionar un hecho real, del cual se tiene muy poco conocimiento, hay quienes advierten que esta historia podría ser un presagio de los tiempos que corren.