Un evento insólito de artes marciales mixtas (MMA) en Rumania desató una fuerte polémica tras enfrentar a dos luchadores masculinos contra tres modelos de OnlyFans en una pelea desigual y brutal.

La velada, organizada por Real Xtreme Fighting, generó indignación en redes sociales y entre fanáticos del deporte, que calificaron el espectáculo como "perturbador". A pesar de que las mujeres intentaron resistir, la superioridad física de los hombres marcó la diferencia desde el inicio y la contienda finalizó con una clara victoria para ellos.

El enfrentamiento tuvo como protagonistas a los peleadores rumanos Costica Prisecaru y Sebastian Rechinu, quienes se midieron contra Alicia Bonita, Denisa Costea y Maria Adriana.

Vestidas con camisetas y faldas blancas, las jóvenes ingresaron al ring con cascos protectores, mientras que sus oponentes no llevaban ninguna protección. Desde los primeros segundos, la pelea se tornó desequilibrada, con los hombres dominando a las mujeres mediante golpes y patadas. Las imágenes del combate, difundidas por TMZ, rápidamente se viralizaron y dieron lugar a un intenso debate sobre los límites éticos en los eventos deportivos y de entretenimiento.

Las críticas en redes sociales no tardaron en aparecer, con muchos calificando el espectáculo como "enfermizo" y asegurando que los organizadores deberían rendir cuentas por permitir un combate de esta naturaleza.

A pesar de la controversia, las participantes parecían estar dispuestas a formar parte del evento, incluso realizando una animada entrada antes del inicio. Sin embargo, al finalizar el combate, una de ellas reaccionó con frustración e intentó seguir peleando después del sonido de la campana.