Los aumentos en los precios por la inflación repercutieron notablemente en el bolsillo de los argentinos, ya que en los últimos tres meses la canasta básica aumentó un 20% y se ubicó cerca de los $120.000 para que una familia no caiga en la pobreza.

Los datos surgen del último informe presentado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), que marcó que en agosto la canasta básica alimentaria (CBA) subió un 7,1%, mientras que la canasta básica total (CBT) creció un 7,6%.

Con estas variaciones, una familia tipo conformada por dos adultos y dos menores necesitó de un ingreso mínimo de $52.990 para no ser considerada indigente. El valor asciende a los $119.757 como monto mínimo para no caer bajo la línea de pobreza.

Uno de los datos que preocupa sobre este informe es la fuerte alza que tuvieron la CBA y la CBT en el último trimestre, ya que entre junio y agosto se incrementaron un 20% y 19%, respectivamente.

La canasta básica alimentaria alcanzó un aumento interanual del 81,4% y un acumulado del 60,8% en los primeros ocho meses del 2022. Por su parte, la canasta básica total subió un 75,2% de forma interanual y un 57,3% en lo que va de este año.

De esta forma, ambas se ubican por encima de la inflación, ya que seg��n el último Índice de Precios al Consumidor (IPC) el incremento hasta agosto llegó al 56,4%. En la comparación interanual, se incrementó al 78,5% y fue superada por la CBA.