Los mandatarios de la Unión Europea (UE) expresaron su preocupación ante las recientes declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien advirtió sobre la posibilidad de imponer nuevos aranceles al bloque. Según los líderes europeos, esta medida podría desencadenar una guerra comercial con repercusiones económicas negativas para ambas partes.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, fue uno de los primeros en reaccionar y dejó en claro que Europa no se quedará de brazos cruzados si se ven afectados sus intereses comerciales. "Si Europa es atacada por sus intereses comerciales, tendrá que hacerse respetar", afirmó antes de una reunión en Bruselas con otros líderes del bloque.

Macron también señaló que estas presiones externas solo refuerzan la necesidad de que Europa actúe con mayor determinación y cohesión. "Por mucho que el Covid-19 y el ataque ruso en Ucrania fueran una llamada de atención para Europa, lo que está ocurriendo (...) con las decisiones y las declaraciones del nuevo gobierno de Trump empuja a la UE a estar más unida y a ser más activa para responder a las cuestiones de seguridad colectiva", afirmó.

La alta representante de la UE para Política Exterior, Kaja Kallas, advirtió que un enfrentamiento con Estados Unidos solo beneficiaría a China. "Si Estados Unidos y Europa inician una guerra comercial, entonces la que se reirá es China", sostuvo la ex primera ministra de Estonia, destacando la interdependencia entre ambas economías.

Mientras Trump justificó su postura asegurando que la UE "se ha aprovechado de nosotros", el canciller alemán, Olaf Scholz, adoptó un tono más diplomático. Aunque reconoció que Europa tiene la capacidad de responder a políticas arancelarias hostiles, instó a ambas partes a priorizar el diálogo.

"Está claro que como espacio económico fuerte podemos forjar nuestro propio futuro y reaccionar ante las políticas arancelarias (...), pero la perspectiva y el objetivo deben ser que las cosas desemboquen en cooperación", subrayó.

Ante este escenario de incertidumbre, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, se comunicó con el presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa, para evaluar la estrategia conjunta frente a los aranceles del 25% impuestos por Trump a su país y a México.

Ambos líderes coincidieron en la importancia de mantener una alianza sólida y en la necesidad de coordinar acciones para proteger el comercio internacional en un contexto de creciente tensión económica.