El presidente de Brasil, Lula Da Silva, se pronunció sobre las elecciones en Venezuela luego de dos días de silencio.

"Fue un proceso normal y tranquilo", afirmó y considero que "es normal que haya una pelea" en relación a las protestas que se llevan a cabo en todo el país.

Por lo tanto, indicó que "las personas que no están de acuerdo tiene derecho a expresarse y a probar por qué no están de acuerdo, así como el Gobierno tiene derecho a probar que tiene razón" y por eso, le pidió al Consejo Nacional Electoral que "presente las actas".

Lo que se defina "tendrá que ser acatado por la gente", marcó en diálogo con la cadena O Globo y añadió: "Todos tenemos la obligación de reconocerlo".

Luego se refirió a los medios de comunicación y cuestionó que "traten esto como si fuera una tercera guerra mundial".

Para concluir, aseveró que  lo que está pasando "no tiene nada grave, nada que asuste".