En el marco de la cumbre del G7, que se lleva a cabo en Japón, estaba prevista una reunión entre el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, quien asistió en condición de invitado especial del bloque, y su par de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva.

Lula se ha mostrado como uno de los líderes globales más activos en la búsqueda de un cese del fuego y un acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania, y les ha presentado a ambos bandos un programa basado en la creación de una mesa de negociaciones, cuyos asientos estén ocupados por los dos países y un grupo de naciones que ambas consideren neutrales, entre las cuales postula a Brasil.

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La cita entre Zelenski y Lula estaba prevista para este lunes a las 15.15, hora de Tokio, pero Zelenski no concurrió y dejó plantado al mandatario brasileño.

"Tenía una reunión bilateral con Ucrania aquí en esta sala a las 15:15. Esperamos y recibimos la información de que llegaba tarde", dijo Lula a los periodistas, según lo relató Reuters, y agregó: “No se presentó. Está claro que tenía citas y no pudo venir", dijo Lula.

Sin embargo, al ser consultado por la prensa Zelenski minimizó el hecho de no haberse podido reunir con Lula.

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Aunque Ucrania aseguró haber leído el plan de Lula y estar analizándolo, así como lo hace con el propuesto por China, la realidad es que Ucrania no está dispuesta a aceptar un alto el fuego justo cuando pone en marcha una poderosa contraofensiva para expulsar del territorio a las tropas de ocupación rusa.

Además, la visita de Lula a Xi Jinping en China han dejado al brasileño en una incómoda posición ante Occidente, en momentos en que EEUU se encuentra sumergida en una puja geopolítica y económica con el gigante asiático.

(Con información de Reuters)