Verónica Morello: "L’Atelier logró transformarse en un clásico"
Verónica Morello es una chef profesional con un alto nivel nacional e internacional que lleva adelante desde hace 20 años junto a su esposo y también chef, Charly Forbes, L’Atelier Bistró en el barrio de Martínez. Este restaurante boutique con estética parisina ofrece una experiencia culinaria que fusiona culturas y sabores a través de platos clásicos franceses con intervenciones innovadoras, elaborados cuidadosamente para adaptarse de manera constante a la frescura de los ingredientes disponibles y al feedback de sus comensales; además de estar acompañados por una destacada carta de vinos seleccionados para ofrecer diferentes experiencias de maridaje.
¿Cómo describirías el concepto principal de L'Atelier Bistro y cómo logran que se refleje en su comida?
El concepto de L’Atelier siempre fue servir una comida de calidad por sobre todas las cosas, destacar la calidad de la comida y un buen acompañamiento con una buena carta de vinos, además de un ambiente que acompañe y un servicio súper correcto, eficiente, pero distendido. Ese siempre fue el concepto del restaurante y lo podemos llevar a cabo y es lo que siempre fue constante y tratamos de que nunca baje la calidad a un costo-precio-beneficio conveniente. Siempre tuvimos una buena relación calidad-precio, ese es el distintivo del lugar.
¿Cuál fue su “secreto” para llevar durante 20 años este bistró donde conviven el negocio, la familia y el trabajo?
Yo creo que el secreto es la perseverancia, la constancia y no bajar los brazos y tampoco la calidad. Cosa que parece súper simple decirlo en palabras, pero en la práctica es una de las cosas más difíciles de conseguir.
¿Por qué creen que los clientes los eligen hace dos décadas? ¿Y cómo supieron mantener dicho vínculo a lo largo de los años?
Tenemos clientes de toda la vida por esto mismo, por sostener la calidad, sostener el servicio. También el vínculo que se genera acá en Zona Norte con los clientes. Entonces hay un vínculo de cordialidad, de seguimiento, de reconocimiento. Muchas veces los llamamos por sus nombres. Y bueno, eso hace también que la gente se sienta querida, se sienta apreciada, generando así un sentimiento de pertenencia.
¿Cómo definen la construcción de sus platos sabiendo que la gran mayoría es modificado en lo que respecta a guarniciones o ingredientes que acompañan a la materia prima principal? ¿Qué buscan con esa renovación constante de su amplio menú?
En cuanto a la construcción de los platos, siempre tratamos de tener diferentes variedades de vegetales. Yo siempre intento que las proteínas estén acompañadas por vegetales y algún hidrato, no repetir hidratos. Tengo un par de fórmulas para armar los platos, pero tratamos de variar estacionalmente, en general utilizando los diferentes productos de estación en las guarniciones, y a veces también variando un poco las proteínas.
Yo creo que lo más importante que L’Atelier logró es transformarse en un clásico. Yo me acuerdo que cuando empecé la escuela de cocina, un profesor me dijo algo que me quedó grabado para siempre, que era que no solo la gente va a un restaurante a consumir comida, también va a buscar un momento, y eso es una gran verdad, porque la gente festeja mucho hitos de su vida, aniversarios, cumpleaños, momentos con amigos y también el hecho de perseverar en el tiempo y transformarse en un clásico. Yo creo que L’Atelier a esta altura se transformó en un clásico sin darnos cuenta, en realidad sin haberlo buscado, por sostener, por estar y por nunca bajar los brazos. Yo creo que ese es el camino en el que vamos a seguir porque es el que sabemos hacer y porque es el que funciona. Así que la proyección es seguir, seguir dando calidad, servicio y seguir siempre en la misma línea sin grandes modificaciones, porque cuando hay un clásico la gente ya va a buscar eso y no va a buscar otras novedades, sino lo que ya sabe que va a conseguir.
Dirección: Av. del Libertador 14520, Martínez.
Instagram: @bistrolatelier